No debí abrir la ventana. Un cielo gris ha echado el ancla. Y el golpeteo de la lluvia contra el cristal es la mejor nana cuando el edredón te llega hasta las orejas. Había olvidado la sensación de saber que nada falta para un momento perfecto. Y es que la añoranza cubre ahora otros horizontes más cercanos, más reales, más dulces y míos.
Nunca te lo he dicho,pero, me encantan tus post.
¡Un Besazo! ;)
Huella dejada por María a las 5 de Octubre 2007 a las 02:50 AM¿Y si sientes frio aun con el edredón hasta las orejas?
¿Y si lo que antes te encantaba ahora te rompe el alma?
Alomejor es que tendriamos que haber abierto la ventana solo para saltar.
:****!
Huella dejada por Maki a las 7 de Octubre 2007 a las 06:29 PM